PABLO ATCHUGARRY: EL SONIDO DE LA ETERNIDAD

Personalmente siempre tuve mucha admiración para el famoso escultor uruguayo Pablo Atchugarry. Desde cuando en 2011 fui por primera vez a Punta del Este y conocí su maravillosa fundación siempre quise tener la posibilidad de conocerlo.

Me encontré con el escultor en una calurosa mañana de febrero en su estudio de Manantiales. Cubierto de polvo de mármol el artista me recibió con los brazos abiertos. A pesar de estar lleno de trabajo él nunca se niega a nadie. Siempre está en obra, no tiene casi nunca un minuto libre. Cuando no deja entrevistas, necesita trabajar sus esculturas comisionadas o en alguna exhibición.

Es un viaje constante entre Uruguay y Italia, donde el artista tiene su segunda casa y taller.

Buenos días Pablo. Es un placer para mí poder finalmente conocerlo. Veo que está trabajando en una obra.

Sí, tengo un cliente que me comisionó una obra y tengo que terminarla cuanto antes.

Durante el corto tiempo que tuve para la entrevista pude constatar el contaste trabajo y compromiso que lleva. Pablo Atchugarry no es solo el hombre escultor sino también alguien que fundó un espacio artístico único. Allí organizan encuentros con clases de la escuela, talleres de arte gratuitos, cine-forum, conciertos y un maravilloso museo de arte contemporáneo, el MACA.

Usted nació en un ambiente artístico y se acercó de manera natural al arte porque su padre era pintor. ¿Cómo fue que eligió la escultura y por qué justo el mármol como material de creación?

La escultura se fue dando naturalmente, necesitaba expresarme en la tercera dimensión. Empecé con la pintura pero sentí que necesitaba dibujar ese mismo objeto en el espacio y pasé de la segunda a la tercera dimensión con la escultura. Al principio usé materiales mas pobres que se encuentran aquí en Uruguay como arena y portland. En 1979 cuando me encontré con el mármol de Carrara en Italia nació mi primera escultura.

¿Por qué le parece que el mármol es el material más indicado para la escultura?

Primero porque el mármol tiene una parte de mito. Pensamos en los grandes escultores de todos los tiempos. El mármol de Carrara fue usado por los Etruscos, los Romanos y después en el Renacimiento con Miquelangel, Bernini, Canova y sigue hasta nuestros días. El mármol siempre fue un común denominador, un objeto precioso hacia el cual los esculturas siempre trataron de acercarse.

Sus esculturas se erigen hacia la verticalidad. Puede ser que busque una conexión entre la tierra, representada por el mármol y el cielo y que sus esculturas sean una especie de puente?

Sí puede ser. Mis obras tienen todas una fuerte verticalidad, como la montaña tiene una verticalidad. Muchas veces digo que mis esculturas son hijos de la montaña que después dan vueltas por el mundo. Tienen un origen muy concreto que son los Alpes Apuanos, su madre y tal vez en mis obras está reflejada la montaña de alguna manera.

Hay algo que siempre me llamó la atención en sus obras. Acerca del tacto, son muy llamativas, su conformaciones te dan ganas de ir con la mano adentro y acariciar la escultura tan suave. ¿Cree que hay algo de erótico también en sus obras?

Veo siempre una figura femenina en mis obras. Esas curvas y cavidades. Tenemos también que pensar que la obra nace del contacto de la mano con el mármol por lo tanto la obra ha sido tocada por el artista y es muy posible que se transmita ese sentido sensual de la obra que crece a través del tacto.

¿Por que eligió Lecco como base de su casa en Italia?

Fue una causalidad. Había encontrado una pintora de Como y conocí a través de ella el lugar y hice mi primera muestra en el 78. Después realicé mi primera escultura en Carrara gracias a una persona de Lecco y luego pasó que en esta ciudad estuve siempre presente de una forma o otra en mis itinerarios europeos hasta que al final hice una obra allí, la Piedad, y me tuve que quedar un año en Lecco. Al final ese año se convirtió en un tiempo más largo y decidí quedarme. Amo mucho toda Italia, es la cuna del arte, es una maravilla.

La exhibición a cielo abierto que hizo en Roma en los Fori Imperiali, me impactó. Lo que me gustó mas era ver cómo esas columnas blancas bien modernas se instalaban de manera perfectamente natural al lado de las mas antiguas.

Sí estoy de acuerdo. Una vez que fue montada la exhibición y esos enormes bloques pudieron ser colocados, tuve la impresión también que siempre estuvieron allí. Había ese fuerte dialogo entre mis obras y las columnas romanas que no hacia ruido para nada. Era presente como una continuidad de lenguajes, de verticalidades. Había como un diálogo humanista entre ellas porque, en el fondo, el arte es una continuidad, un camino por el cual muchos artistas transitan y muchos de ellos pasan por ese mismo camino a lo largo de los siglos. Por eso sentimos de repente que ciertas cosas tienen gran vigencia actualmente. El paso de los siglos no lo consumió sino que quedó esa imagen perfectamente actual.

Quisiera hablar de un artista escultor italiano de la Cerdeña y hablar de lo que usted hace a través de algunas frases que él dijo. No sé si usted lo conoce Pinuccio Sciola…

No, lamentablemente no lo conozco.

Murió en el 2016 y venía de un pequeño pueblo del sur de la Cerdeña. Trabajaba la piedra autóctona sobre todo basalto y la piedra caliza. Las cortaban y las sonaban. Las acariciabas con su mano o con otra piedra y producía sonidos. El trabajo que ustedes dos hacen es muy diferente, pero usan la misma materia. Y los dos nombraron a Miquelangel, de esa necesitad de sacar de la piedra para crear una obra de arte.

Sí, que no se adjunta a la piedra claramente sino más bien se quita siempre. Este concepto de Miquelangel es anterior a él. Justamente el punto es dónde pararse en el quitar. Se quita para tratar de descubrir a dónde está la esencia. Se quita siempre que no se puede adjuntar. Y la esencia es diferente para cada artista. Cuando uno terminó en la escultura ya no toca más que decir que eso estaba en el corazón de la piedra, en el corazón de la montaña. Entonces, después, la idea del sonido, del viento, de que participen otros elementos me parece muy interesante.

¿Le pasó alguna vez de ir más allá, de sacar demasiado?

No porque en realidad voy sacando y siempre queda más material del que yo pienso que va a terminar la escultura. Siempre me tomo unos márgenes de confianza con el material, o sea voy llegando sabiendo que es irrecuperable: cada pedazo quitado está quitado para siempre. Siempre dejo más abundantes volúmenes hasta que después llego a la esencia misma de lo que yo quiero dejar en la obra.

Pinuccio Sciola dijo que la piedra tiene un alma, memoria, esencia, tiempo y elasticidad. La piedra tiene un valor inconmensurable. ¿Qué sonido tiene el mármol?

El sonido de la eternidad

“Yo creo que la cosa más natural en este mundo debería ser rezar para el sol y las piedras. Estas dos energías justifican la presencia de este planeta en este universo. Siempre nos han vendido la piedra como algo mudo, duro y rígido. Me sabían dar una definición de piedra? La piedra no esta muerta. la piedra es viva.«

La piedra es la esencia de la montaña, la esencia de una creación. Hay que respetarla porque ella misma es parte de esta creación del universo. El ser humano tiene primero que aprender a conocerla, y cómo todas las cosas que se conocen después se pueden amar y respetar. Pienso que cuando la piedra y el mármol se transforma en escultura este último se convierte en un lenguaje de generación en generación que puede aspirar a la eternidad.

¿Cuando usted vende una obra y alguien compra su obra y la lleva a su propia casa siente que esta persona está percibiendo este mismo lenguaje eterno?

Sí, creo que sí. Primero que todo quien tiene una obra de arte en la casa es un poseedor efímero porque este mismo mármol tiene muchos años y estaba ya creado en esta tierra por lo menos hace 15.000 años. Entonces ese momento de contacto del escultor con la materia está destinado a ser transmitido. Ahora el poseedor de esa misma obra es uno y quien sabe en unos años quién será. El conocimiento artístico hay que transmitirlo.

¿Y no le parece que está soltando o dejando una de sus creaciones, de sus hijos de la montaña dándoselo en la mano de alguien más?

No, porque los hijos tienen que hacer su vida. Lo importante es el lazo con el padre que no se pierde pero hay que aprender a dejar ir.

Fellini, el grande director de cine italiano, elaboraba muchos de sus personajes grotescos a partir de sus sueños. Tenia al lado de la cama un cuaderno que llenaba de dibujos al despertar. Esos dibujos se convirtieron después en los personajes de sus historias. ¿Usted tiene sueños que lo ayudan a realizar sus obras?

Lamentablemente no recuerdo mis sueños. Todos soñamos pero al no acordarme nada es una área que no está presente en mi conciencia.

¿Existe un desafío, algunas obras o proyectos que aun no hizo y quisiera realizar?

Bueno los proyectos son de todos los días. A mi me gusta el proyecto de la armonía, de la paz. De que la humanidad encuentre su camino, su camino sin guerras y sin tratar de sobrevalerse sobre los demás. Y este me parece que es un camino individual también. Y es algo que cada uno tiene que encontrar dentro de sí mimo. Pienso que el arte puede ser un buen vehículo. Por ejemplo aquí el proyecto del parque de esculturas significa que hay muchos artistas con lenguajes diferentes y con materiales diferentes y el mensaje es que hay que saber respetar esa diferencia. Ese es el camino que hay que seguir recorriendo, un camino que se hace todos los días.

Acerca de este tema, Pinuccio Sciola decidió no abandonar nunca su pueblo sino más bien traer el arte a su tierra para que la gente pudiera conocer más. Justamente acerca de esto usted también hizo algo parecido. Vive su vida entre Italia y Uruguay pero decidió crear esta Fundación y el parque donde de forma gratuita cualquier persona puede llegar y respirar arte y que sus esculturas puedan quedarse en su lugar de nacimiento. Esto me parece algo muy importante y muy lindo sobre todo en relación a su contacto con la naturaleza en un espacio totalmente al aire libre entre arboles y pájaros.

Para mí es básico el encuentro entre naturaleza y arte. Justamente en este parque está la fauna y la flora autóctona porque el mensaje tiene que ser el respecto hacia la naturaleza que a veces el ser humano ha perdido, un mensaje sobre todo hacia la nueva generación. Arte, que es la expresión tal vez mas intima del ser humano, y naturaleza. Somos parte de la naturaleza. Por esto me vino la idea de este proyecto donde también van quedando algunas obras emblemáticas mías para tratar de que sea un mojón, un legado espiritual también.

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